Por Rafael Ruiz Moscatelli via La furia y la nada
No sé quien es Iosi, debe ser su seudonimo, lo publicaron en Caballo de Troya, que es como las juveniles de Random House, bajo, no sé si todavía, la batuta editorial de Cosntantino Bertolo, nombre imposible de twitear, retomo, si no me pongo yo como tema, no es la intención, Iosi es un narrador de origen chileno y que al parecer vive más en Suecia que en ninguna parte, es su segunda novela, la primera es Opendor. Bueno, pero esta: Estocolmo, es un paisaje del alma de un emigrante que vuelve a su país, en este caso Chile, cae en Santiago, la capital, viaja a Concepción a ver a su madre y hace aquí todo lo que hace en Suecia, es lógico, el ha pasado tiempo allá, ha labrado sus preferencias, incluídas las sexuales, ama a una pesadilla de origen servio, que tienen contra los servios siempre les tocan lo peores papeles, un gran pueblo con sus dosis de maldad como todos los que las pueden expresar, de lo cual no se salva ningún país. Volvamos, Iosi mira su origen sin saber que es, eso me pareció extraordinario. Lo seguí por lugares conocidos gozando su distancia, desde donde iluminaba rincones de mi ciudad muy vistos, requete vistos, casi en desuso, aburridos, trágicos, sin gracia y sin embargo atados a nuestras vivencias. Los personajes de Iosi son desolados de si mismos y eso marca una narración, llena de otros detalles, que salvo en lo sexual, uno podría eliminar, sin embargo el autor obliga a leerlos, esa es su gracia, uno lo lee. Y lo seguiremos leyendo. No sé donde se compra, a mi me lo pasó hace un tiempo Pablo.